Milán: Promesa "Rematori di Lepanto"
Aprovechando el puente de san José Obrero, nos fuimos con los nios de postconfirmación (de 11 a 13 años) a Roma durante tres días. Éstos después de recibir el sacramento de la Confirmación entran en el grupo llamado: "Rematori di Lepanto" (los remadores de la batalla de Lepanto), en el cual prometen seguir a Jesús y dar testimonio de Él. Esta promesa se renueva todos los años y con este motivo se organiza un viaje a los diversos puntos de la geografía italiana. Este año, como está dedicado especialmente a la figura del Apóstol san Pablo, hemos ido a Roma, al lugar donde el "apostol de los gentiles" sufrió el martirio (Le tre fontane). También visitamos la basílica de san Pedro del Vaticano.
Y en el viaje de vuelta hemos visitado la preciosa Basílica de Orvieto (localidad próxima a Roma) en donde los niños han realizado su promesa durante la celebración de la Eucaristía. Esta promesa consiste en el simple gesto de recibir, al final de la eucaristía, una tarjeta en la cual aparece el nombre del niño como miembro integrante del grupo de "Rematori di Lepanto" junto con una oración de consagración a Jeús Rey del Universo, que deben rezar todos los días. Al tiempo que recibe la tarjeta, el niño debe invocar un santo (uno que previamente él ha escogido) pidiendo su intercesión para que pueda seguir y testimoniar a Jesús en su vida cotidiana.
Y en el viaje de vuelta hemos visitado la preciosa Basílica de Orvieto (localidad próxima a Roma) en donde los niños han realizado su promesa durante la celebración de la Eucaristía. Esta promesa consiste en el simple gesto de recibir, al final de la eucaristía, una tarjeta en la cual aparece el nombre del niño como miembro integrante del grupo de "Rematori di Lepanto" junto con una oración de consagración a Jeús Rey del Universo, que deben rezar todos los días. Al tiempo que recibe la tarjeta, el niño debe invocar un santo (uno que previamente él ha escogido) pidiendo su intercesión para que pueda seguir y testimoniar a Jesús en su vida cotidiana.
Por Santiago Fernández Carballo
ORACIÓN A CRISTO REY DEL UNIVERSO
JESÚS, SEÑOR MÍO Y REY MÍO,
QUE HAS DERRAMADO TU SANGRE PARA SALVARME.
GUÍA MIS PASOS HACIA TI, QUE ERES EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA.
DAME UNA INTELIGENCIA SEDIENTA DE VERDAD;
UN BRAZO FUERTE PARA DEFENDERLA,
UN CORAZÓN VALIENTE PARA TESTIMONIARLA.
TE OFREZCO TODA MI VIDA:
EL JUEGO Y EL ESTUDIO,
LAS PALABRAS Y EL SILENCIO,
LAS PENAS Y LAS ALEGRÍAS;
SIGUIENDO LA COMPAÑÍA QUE ME HAS DADO COMO SIGNO DE TU PRESENCIA,
PARA QUE MI VIDA SEA PLENA Y EL MUNDO TE RECONOZCA.
MARÍA, REINA DE TODOS LOS SANTOS,
SOSTIENE MI ORACIÓN.
AMÉN.
Comentarios
Esperamos verte con todo ánimo e ganas cando te veñas para ordenación e que nos contes persoalmente o que aquí vimos reflexado en palabras.
Unha aperta grande.
Bueno, e outra para ti, Merche, jeje.